domingo, 21 de marzo de 2010

Retrato de Miguel Hernández


Autor: A. Buero Vallejo
Miguel se lo envía a su mujer, Josefina Manresa, el 4 de marzo de 1940, con este breve texto:
No quiero dejar de cumpir en lo que puedo mi palabra, y ya que no puedo ir de carne y hueso, iré de lápiz, o sea, dibujado por un compañero de fatigas, como verás, bastante bien. Se lo enseñarás al niño todos los días para que vaya conociéndome, y así no me extrañará cuando me vea.

jueves, 11 de marzo de 2010

viernes, 12 de febrero de 2010

Por Rodrigo González Martín. Con motivo de la exposición HOMENAJE LITERARIO, en Segovia, Junio de 2009

El Adelantado, 27 de junio de 2009
Sorprende la determinación con que trabaja Inmaculada Cuesta en su obra pictórica a pesar de su formación autodidacta y del poco tiempo de su actividad. Su pintura integra una referencia abstracta de tradición postcubista, muy constructiva, con pigmentos sólidos y una pincelada muy compacta, en la que los colores intensos presiden las composiciones vivas, contrastadas y muy sugerentes. Sobre estas composiciones bien estructuradas deja correr el color que se licua provocando ensoñaciones y superposiciones sutiles, repletas de matices y sugerencias poéticas. Su abstracción adquiere así un cierto tono gestual y lírico, a la vez. A esta composición de manchas cromáticas Inmaculada Cuesta suma papeles variados creando collages con empastes y superposiciones en los que acumula sin violencias texturas y emociones muy agradecidas. Especialmente interesantes son los collages de pequeños formatos en los que el papel vegetal y los colores primarios se funden originando fantasías mínimas pero intensas. En estas obras Cuesta deja volar su oficio y su imaginación creando una pintura libre y relajante, feliz y alegre. Colores y texturas se alían para crear un canto a la vida lejos de dramatismos y de convulsiones extremas.A la par Inmaculada Cuesta desarrolla su obra en un estilo más descriptivo y referencial, que, sin abandonar el gesto ni el color de la abstracción, lo proyecta de forma muy metódica a crear un peculiar y rico diálogo con distintos poetas de su interés. De ahí el título de esta exposición en la Sala del Casino de la Unión de Segovia, "Homenaje literario". Aumentan los tamaños de las obras, algunos realmente exigentes, se refuerza el grafismo al servicio de un tono más ilustrativo, el color sigue construyendo las composiciones y las figuras, y aparece un cierto sentido amable, incluso irónico de las imágenes para humanizar el peso de los textos con los que dialoga.En la exposición del Casino Inmaculada Cuesta nos ofrece cinco obras de la Serie Quijote de 2007, sobre los personajes cervantinos D. Quijote, Dulcinea, Rocinante, Sancho y Rucio. En todos aparece la ironía, la ternura, la gracia y la sabiduría propias de los personajes manchegos. Pero también una relectura de los conceptos de libertad y de viaje existencial que nos descubriera Luís Rosales en su ensayo sobre el Quijote. En la pintura de Cuesta se asume la tentación y el reto de interpretar una vez más a los personajes universales de Cervantes desde una plástica colorista, gestual e ilustrativa.De nuevo el diálogo entre la pintura y la literatura se hace fecundo. La interpretación ahonda el problema de la recepción de una obra y de repensarla desde una actualidad personal.La exposición se completa con un diálogo mayor con los poetas andaluces Juan Ramón Jiménez y Antonio Machado. Sobre Juan Ramón se exponen dos composiciones collages basadas en fotografías proyectadas en el papel y después coloreadas, una basada en el libro Diario de un poeta recién casado y otra una libre composición con imágenes en el Metro y en la Feria del Libro. Junto a un retrato de Juan Ramón esta serie viene a ser un homenaje al poeta de Moguer desde la plástica personal de I. Cuesta.Se recuerda a Antonio Machado y a Leonor en otro collage que desarrolla una conocida fotografía de 1909 en Soria. Junto a su labor de retratista, Inmaculada Cuesta ha encontrado un espacio de diálogo entre la pintura y la palabra, entre el color y la rima, que comparten el aliento poético, tan universal y tan abstracto, que suponemos va a centrar la creación inmediata de la pintora.
Rodrigo González Martín. Prof. de Creatividad PublicitariaFacultad de CC. Sociales, Jurídicas y de la ComunicaciónUniversidad de Valladolid(Segovia)Segovia, Junio de 2009

jueves, 23 de julio de 2009

Exposición de Pintura: HOMENAJE LITERARIO
Autora: Inmaculada Cuesta
Lugar: Sala UNTURBE del Casino de la Unión. Segovia
Fecha: 16 al 30 de Junio de 2009


Serie Quijote 07: DON QUIJOTE, DULCINEA, ROCINANTE, SANCHO Y RUCIO. Técnica mixta (acrílico y collage) sobre tabla

El conjunto de las cinco obras tiene algo de la ternura, ironía, gracia, sabiduría, univeralidad… de la obra literaria; que por ser un CLÁSICO admite interpretaciones en todos los tiempos y lugares

Nace de una idea propia sobre los protagonistas de la obra literaria. Las ideas artísticas a veces no son comerciales; pero el empuje es irresistible cuando es verdadero y vital. Por ese motivo he apostado por una ejecución LIBRE Y PERSONAL, que ha esperado 2 años la ocasión de salir a la luz.


Parte de mi Homenaje Literario para esta exposición son los POETAS andaluces Juan Ramón Jiménez y Antonio Machado

A lo largo de 2008, 50º de la muerte del Poeta, he mostrado una exposición titulada “Homenaje Pictórico a Juan Ramón Jiménez”. De esa colección traigo a Segovia dos composiciones (fotografía, collage, pintura y dibujo). Una de ellas está inspirada en Diario de un Poeta reciencasado, dedicada a su amor y al mar. Zenobia, su fuente de inspiración, su ayuda imprescindible, y mucho más, tenía que estar presente. La segunda composición está montada sobre fotografías de lectores en el METRO y en la Feria del Libro de Madrid; es un Homenaje HOY al Poeta de SIEMPRE. Para esta ocasión he pintado un pequeño retrato de Juan Ramón sobre cartón.

En Segovia, en junio de 2009, continúo en mi pintura el camino literario que inicié con Cervantes y Juan Ramón; ahora con el retrato de Antonio Machado, otro poeta andaluz, también ligado a esta ciudad. Y junto a él, el rostro de su amada, Leonor. Es una composición de dibujo y collage sobre cartón, que he roto por la mitad, simbolizando así la ruptura, en su inicio, de la felicidad recién estrenada por la muerte de mi esposa, cuyo recuerdo me acompaña siempre (A. Machado, 1917). Precisamente en 2009 se conmemoran los 100 años de este matrimonio; una excelente ocasión para volver a conmovernos con su poesía…


¿Y ha de morir contigo el mundo mago
donde guarda el recuerdo
los hálitos más puros de la vida,
la blanca sombra del amor primero,

la voz que fue a tu corazón, la mano
que tú querías retener en sueños,
y todos los amores
que llegaron al alma, al hondo cielo?
¿Y ha de morir contigo el mundo tuyo,
la vieja vida en orden tuyo y nuevo?
¿Los yunques y crisoles de tu alma
trabajan para el polvo y para el viento?